MICROSOFT
Hasta (…) noviembre de 2006, Microsoft no fue capaz de sacar al mercado su propia respuesta al iPod. Se llamaba Zune (…) Dos años más tarde, se había hecho con una cuota de mercado de menos del 5%. Tiempo después, Jobs se mostró despiadado al hablar de las causas del diseño poco inspirado del Zune y de su debilidad en el mercado:

Cuanto más viejo me hago, más me doy cuenta de lo mucho que importa la motivación. El Zune era una porquería porque a la gente de Microsoft en realidad no le entusiasmaba la música o el arte tanto como a nosotros (…) Creamos el iPod para nosotros mismos, y cuando estás fabricando algo para ti mismo, o mejor para tu mejor amigo o para tu familia, no vas a conformarte con cualquier chapuza. Si no te entusiasma algo, entonces no vas a dar un paso más de lo necesario, no vas a trabajar ni una hora de más, no vas a tratar de poner en duda el estau quo.

Del libro Steve Jobs. Walter Isaacson. Ed. Debate. 2011